El legado de los pueblos mayas se respira en Guatemala, Belice, Honduras y El Salvador. A través de un viaje multidestino, podrás adentrarse en la historia de esta maravillosa civilización y empaparte de sus increíbles costumbres y la riqueza de su cultura. Una gozada para los amantes de la historia y la arqueología. El viaje debes comenzarlo en Guatemala, conocida como el Corazón del Mundo Maya debido al misticismo y tradiciones que los antepasados plasmaron en su gente.
La antigua ciudad maya de Tikal, ubicada en el municipio de Flores, departamento de Petén, constituye el asentamiento prehispánico más extenso en Guatemala, cuya población pudo haber alcanzado los 100.000 habitantes durante su época de mayor esplendor. Tikal cuenta con alrededor de 5.000 edificios prehispánicos en un área de aproximadamente 16 km², de los cuales únicamente el 5% se encuentra restaurado y habilitado para ser visitado. Tikal presenta una larga secuencia histórica relatada en sus estelas y altares con una sucesión directa de la dinastía real. Debido a sus riquezas culturales y naturales de valor universal excepcional, en 1979 fue declarada por la UNESCO como el primer sitio Patrimonio Mundial Cultural y Natural de la Humanidad, con una muestra significativa de selva subtropical húmeda, hábitat de numerosas especies de flora y fauna. Simplemente espectacular.
A la hora de planificar tus excursiones en Belice, no puedes perderse las ruinas de Xunantunich. Alberga la segunda pirámide más alta de todo el país y místicas historias de la civilización ancestral que la habitó. Su nombre se puede traducir como doncella o mujer de piedra, y cuenta la leyenda que en este yacimiento solía aparecer una mujer fantasma muchos siglos atrás. Este enclave está rodeado de una espectacular naturaleza.
En Honduras destacan las conocidas ruinas de Copán, localizadas en el occidente del país, en el Departamento de Copán, a sólo 14 kilómetros de la frontera El Florido con Guatemala. Por muchos años, Copán Ruinas ha tenido fama por sus magníficas ruinas mayas, declaradas por la UNESCO Patrimonio Arqueológico de la Humanidad en 1980. Hoy en día Copán Ruinas es considerada como el París del mundo Maya en Centroamérica. Otro sitio que respira historia por los cuatro costados.
En El Salvador, hay dos visitas obligadas: El Parque Arqueológico Joya de Cerén, un ícono de la cultura prehispánica que te muestra cómo fue la vida cotidiana de los mayas. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1993, y es llamado La Pompeya de América, en comparación al sitio arqueológico de Italia; por ello es un destino imperdible de El Salvador. Por su parte, el Parque Arqueológico El Tazumal, un importante y sofisticado asentamiento maya que existió entre los años 100 y 1200 D.C. Tras una larga ocupación, el sitio fue abandonado alrededor del año 1200 D.C. y ahora es un tesoro lleno de historia en Chalchuapa, en el departamento de San Ana.
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