Guatemala y Belice son dos países centroamericanos ideales para hacer turismo de naturaleza. De hecho, el número de turistas que los eligen cada año para realizar deportes al aire libre no para de crecer. Sin duda, un dato que refleja a la perfección que no solo son destinos de sol y playa.
Blue Hole: la meca del buceo está en Belice
El Blue Hole o Gran Agujero Azul es una cueva submarina ubicada frente a la costa de Belice. En concreto, queda a unos 100 kilómetros de la parte continental del país y dentro del atolón Lighthouse Reef.
Este sumidero alcanza los 123 metros de profundidad y los 300 metros de ancho. Se formó hace más de 12 000 años y debe su nombre al intenso color azul que muestra cuando se avista desde el cielo.
En la actualidad, está considerado como uno de los mejores lugares del mundo para practicar buceo. A pesar de lo poco que puede circular el agua en su interior, está repleto de peces, tiburones, esponjas y corales.
Reserva forestal Mountain Pine Ridge
Esta impresionante reserva natural se encuentra en el distrito de Cayo. Con una extensión aproximada de 300 kilómetros cuadrados y plagada de arroyos, valles, cuevas y cascadas, ofrece una experiencia única para las personas que aman la aventura.
Respecto a la fauna que vive en este paraje, destaca la gran presencia de aves, como el pájaro carpintero, , el lechón negruzco, el azulejo oriental, el piquituerto y el águila arpía.
Un lugar imperdible de esta reserva es Big Rock Falls, una cascada de 150 metros en la que, aparte de contemplar unas vistas espectaculares, es posible darse un baño.
Reserva marina de Hol Chan: practicar esnórquel rodeado de peces
Situada cerca de Cayo Ambergris y Cayo Caulker, en sus 18 kilómetros cuadrados hay arrecifes de coral, bosque de manglar y praderas de pastos marinos.
Considerado el segundo arrecife más grande del mundo, los visitantes tienen la posibilidad de practicar esnórquel y buceo rodeados de mantas y otras especies marinas.
Gracias a la claridad de sus aguas, se pueden contemplar diferentes tipos de coral, bellos pastos marinos, tortugas, delfines, langostas y otros muchos animales que pueblan esta reserva de Belice.
Atitlán es el lago más bonito del mundo
El lago de Atitlán, que se sitúa a unas cuatro horas de Ciudad de Guatemala, es un paraje único en el mundo. Se encuentra rodeado de volcanes y de pequeños pueblos pesqueros, lo que conforma una panorámica excepcional.
Dar un paseo en kayak o en una pequeña embarcación a motor es una actividad muy habitual en este lago. A la vez que se disfruta de las vistas, es recomendable hacer una parada en Chichicastenango para conocer el mercado que lleva el mismo nombre y que destaca por su gran colorido..
La puerta de entrada al mar Caribe la ofrece el río Dulce
En Guatemala también se encuentra el río Dulce. En concreto, se ubica entre el lago de Izabal y la Bahía de Amatique. Alcanza los 43 kilómetros de largo.
La fauna de este río es maravillosa. De hecho, al recorrerlo es posible avistar con mucha facilidad manatíes, cocodrilos y un sinfín de aves. Por este motivo, no es de extrañar que se trate de un entorno protegido desde 1955.
Una actividad muy popular entre los viajeros es el rafting. En muchos tramos, sobre todo en la zona del cañón, hay aguas bravas que invitan a la práctica de esta emocionante disciplina deportiva.
Esta es una oferta de ocio en la naturaleza que casi ningún otro lugar en Centroamérica puede ofrecer. Por ello, se trata del sitio perfecto para culminar cualquier viaje multidestino en la región.